Como ríos, las calles de Cuautitlán Izcalli

En ríos se convirtieron las calles de Cuautitlán Izcalli, luego de que abrieran las compuertas de la presa El Ángulo, que estaba a punto de desbordarse, luego de las fuertes lluvias registradas este martes.

Sin embargo, los vecinos no pudieron poner a salvo sus pertenencias

Elizabeth Reséndiz, vecina de las calles afectadas aseguró que nadie les aviso que se iba abrir la presa, " simplemente mi papá estaba haciendo un café cuando de repente ya tenía el agua en los cuartos de hasta el final que están un poquito más altos, pero al final de cuentas todo se inundó, en menos de media hora estábamos inundados arriba de 40 centímetros".

En cuestión de minutos, los vecinos de la zona vieron en medio del agua sus muebles y artículos más preciados.

“Aquí el nivel del agua fue de aproximadamente de metro y medio. Ahí ve la estufa, el refrigerador el comedor, toda la despensa la vitrina, todo se perdió automáticamente no tenemos nada", mostró Karina, que veía sus cosas en el agua sucia.

Se estima que en esta zona más de 200 familias resultaron afectadas al penetrar el agua a sus viviendas y muchas familias solo pensaron en ponerse a salvo.

"Poner a salvó a mis hijas, los niños, mis sobrinos, una de mis hijas que está enferma, fue lo principal, en la segunda planta poner a salvo a los niños".

 Y aunque a la zona llegó ayuda, en colonias como Ejidos de San Isidro, el agua sigue saliendo por coladeras y corriendo por las calles, pues la presa será vaciada.

Arturo Vilchis, titular de Protección Civil explicó que se va a vaciar todo el vaso.

"Se va a vaciar el vaso para hacer otra vez limpieza, se hizo limpieza previa a la temporada de lluvias, pero sobre todo estos vasos que tienen mucho follaje en el interior, con la propia humedad crece con gran rapidez, vamos a dejar que se vacíe totalmente tal vez en los próximos días vean que corre alguna cantidad de agua por alguna calle, es debido a eso, se va a vaciar completamente para poder limpiar y despolvar y se dé el mejor servicio para lo que falta de la temporada".

En la zona trabajan 16 brigadas para ayudar poner costaleros en las entradas de las viviendas, vacunando para evitar infecciones y realizando censos para la llegada de la ayuda, mientras los vecinos principalmente los enfermos temen por su salud.

"Yo me dializo, necesito la limpieza, me exigen que la tenga y ahorita hasta mi cisterna se llenó, y ahora me da miedo que se venga una infección y que venga una infección, hoy tenía cita en el seguro y no pude ir por lo mismo", señaló Héctor García, vecino afectado.

Las autoridades señalaron que el saldo fue solo de daños materiales tras el desbordamiento de la presa, pero para poder atender cualquier contingencia se instalaron seis albergues en la zona en coordinación con el DIF municipal, a fin de otorgar cobijas, colchonetas y alimentos.

Asimismo, se desplegaron a 700 funcionarios en coordinación con autoridades, federales y municipales para agilizar la limpieza y apoyo a las 240 casas que resultaron afectadas en Izcalli, Atizapán y Ecatepec.

El secretario general de Gobierno, José Sergio Manzur explicó que además del desbordamiento de la presa El Ángulo en Izcalli, el problema de la saturación de los drenajes, de acuerdo con los encargados de las redes de drenaje, obedeció a la acumulación de basura, por lo que hizo un llamado a los habitantes a evitar tirar basura en las calles, porque estos desechos se convierten en tapones que impiden el buen funcionamiento de las coladeras.

En Ecatepec, en coordinación con el alcalde Indalecio Ríos Vázquez un grupo de 70 trabajadores de la jurisdicción sanitaria y de la alcaldía acudieron a las colonias San Agustín y San Gabriel, donde se instalaron 15 unidades médicas móviles y está a disposición de la población el Centro Médico San Agustín para brindar a la población consulta médica vacunas antitetánicas, pastillas de cloro, vida suero oral y antimicóticos para evitar enfermedades infecciosas.

Asimismo, se realizan trabajos de limpieza en la barranca “Las Venitas”, el arenero ubicado en San Carlos y en los cárcamos de San Agustín y Canal de Salas, con el objetivo de prevenir inundaciones y encharcamientos.

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