Inegi pone en riesgo su credibilidad; datos sobre pobreza y su medición

18/07/2016

¿Inegi pierde credibilidad? Datos sobre pobreza y medición

¿Inegi pierde credibilidad? Datos sobre pobreza y medición

Mario Luis Fuentes | Colaborador

Licenciado en Economía por el ITAM, y Maestro en Desarrollo Regional por el Instituto de Estudios Sociales de la Universidad de la Haya Holanda. Realizó...

Análisis Político con Mario Luis Fuentes

El Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) dio a conocer el pasado 15 de julio los resultados del Módulo de Condiciones Socioeconómicas (MCS) de la Encuesta Nacional de Ingreso y Gasto en los Hogares (ENIGH). La relevancia de este instrumento se encuentra en que desde el año 2008 ha sido la base para la medición multidimensional de la pobreza. De manera sorpresiva, el anuncio de los datos se dio acompañado de una nota del Inegi en la cual sostiene que se trata de una “edición mejorada” de la información. El comunicado es parco y dice a la letra: “… como parte de un proceso de mejora continua, durante el levantamiento del Módulo de Condiciones Socioeconómicas (MCS) 2015, el Inegi aplicó el año pasado criterios de captación y verificación de información en campo de mayor rigor”.

Como resultado de esos nuevos “criterios de captación y verificación”, los ingresos en los hogares más pobres presentan un diferencial de 33% respecto de lo que se midió en el año 2014.

La cuestión es mayor, porque el Segundo efecto de esos nuevos “criterios mejorados” es que los datos que hoy tenemos no son comparables en el tiempo. Es decir, el Inegi decidió, por cuenta propia, que debemos hacer un “borrón y cuenta nueva” en la medición de los ingresos de los hogares.

El Coneval ha fijado posición y con ello se abre un capítulo inédito en la historia institucional reciente de nuestro país: dos organismos autónomos fijan posiciones diametralmente opuestas respecto de información clave para el desarrollo nacional.

En un contexto de erosión de la credibilidad y confianza en las instituciones, poco abonan estas “decisiones técnicas” a consolidar un régimen democrático en el que se aspira que la fortaleza institucional le garantice a la ciudadanía imparcialidad y objetividad; pero sobre todo, compromiso y responsabilidad ética.

COMPARTE TU OPINIÓN