Las mañaneras, un modelo circular

ISABEL GONZÁLEZ AGUIRRE   02/12/2019

Las mañaneras, un modelo circular

Las mañaneras, un modelo circular

ISABEL GONZÁLEZ AGUIRRE

Con el arribo de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República, la manera de comunicar del gobierno federal cambió.

Desde el 3 de diciembre del 2018 y a la fecha, las llamadas conferencias matutinas o mañaneras desde Palacio Nacional o algún estado del país son la herramienta preferida del Presidente para enviar mensajes de su interés, a grado tal que en muchas ocasiones es el único acto público del día en su agenda.

La relevancia del “diálogo circular” —como él la llama— la estableció desde el inicio de su gestión cuando al encabezar la primera conferencia de prensa el 3 de diciembre del año pasado declaró que a través de este mecanismo se proporcionaría a toda la información del gobierno a los ciudadanos y se garantizaría el derecho a la información y a la libertad de expresión.

Al cumplirse un año y encabezar 255 “ejercicios de comunicación” como él los llama, expertos en comunicación política e imagen pública ofrecieron a Grupo Imagen un análisis de los encuentros del Presidente con los representantes de los medios de comunicación en cuanto a su propósito y audiencias.

A continuación, se reproducen algunas de las ideas principales del análisis elaborado en entrevistas por separado por Vianey Esquinca Montaño, maestra en Imagen Pública y socia directora de Cuadrante Estrategia y Comunicación, S.C. así como por parte de Luis Estrada Straffon, responsable del Taller de Comunicación Política que analiza desde su inicio las características generales de cada conferencia, las asistencias y participaciones de funcionarios públicos, las preguntas de la prensa y la audiencia en redes sociales.

NO SON TRADICIONALES

Desde la óptica de Vianey Esquinca Montaño no se trata de conferencias de prensa tradicionales para los medios de comunicación, sino de un canal para enviar mensajes por parte del Presidente a determinados sectores sociales.

Estas conferencias no son conferencias de prensa, son informes diarios de gobierno donde repite una y otra vez los mensajes y los medios son solamente un pretexto para responder; debemos entender que estos ejercicios de comunicación no son para los medios y son también una herramienta para su propia comunicación en redes,” indicó la especialista.

En tanto que, el seguimiento hecho por el Taller de Comunicación Política, a cargo de Estrada Straffon, advierte que no todos los periodistas que acuden temprano al salón Tesorería pueden preguntar a lo largo de la hora y media que, en promedio, se prolonga el encuentro con el presidente.

(El Presidente) no le da la palabra a los medios tradicionales, sino a los medios, entre comillas, digitales; el 40% de las preguntas viene de medios entre comillas digitales y esas preguntas o porcentaje es más alto que el de la televisión, que la radio y que la prensa. En las conferencias más recientes lo que hace el Presidente es tomar mucho tiempo en contestar”, puntualizó.

El mismo reporte, subrayó Estrada, estableció que el Presidente da de qué hablar, pero no necesariamente pone la agenda, ya que sólo 8% de las ocasiones los temas que se abordan previo a la sesión de preguntas y repuestas se convierten en notas nacionales.

Se genera debate al dar de qué hablar, discusión y la gente puede contratar las afirmaciones del Presidente y en ese sentido sí hay un ejercicio en el cual el Presidente permite que la gente escuche lo que dijo”.

Lo anterior lleva a los expertos a considerar que no necesariamente se informa puntualmente sobre la gestión del gobierno y que muchas preguntas sirven para prolongar la respuesta a una pregunta.

Afirmó que algunos periodistas ya llevan preparada sus preguntas y sólo se comen el tiempo de la conferencia; por ejemplo hubo una conferencia que duró dos 2 horas y sólo cinco reporteros participaron con preguntas” comentó Vianey Esquinca.

Además, la experta vislumbró que en lo que falta del sexenio los integrantes del gabinete tendrán que ser fuentes de información también fuera de la conferencia de prensa y los comunicadores profesionales “más creativos” y persistentes para hacerse de información periodísticamente relevante.

NIVELES DE AUDIENCIA DE LAS MAÑANERAS

Pese a ser el eje de la política de comunicación social del gobierno federal, la Presidencia no cuenta con ningún documento o reporte oficial en cuanto al nivel de audiencia de las conferencias de prensa matutinas de Andrés Manuel López Obrador, según afirmó a este medio Jesús Ramírez Cuevas, vocero del Presidente de México.

En ese sentido, Luis Estrada hizo notar que en el caso de Facebook, el Presidente cuenta con cerca de siete millones de seguidores.

Lo que hemos observador es que de los casi siete millones que tiene el Presidente que son muchos, el promedio de vistas de las conferencias es de menos de 7%, alrededor de 400 mil” detalló.

Precisó que existen picos de audiencia en las conferencias, como por ejemplo cuando se explicó el pasado 31 de octubre de este año la línea del tiempo del llamado Cualiacanazo o bien, cuando surge algún “personaje” a partir de lo que se le pregunta.

El tema de los personajes que han surgido en las conferencias de prensa es una interesante estrategia para que la gente nada más por morbo quiera voltear a ver quién es Lord Molécula, no es gratuito; ya crearon personajes que la gente va a ver cómo son, para burlarse, si tú quieres, pero regresa a ver las conferencias”, subrayó Esquinca Montaño.

Cabe puntualizar que en el caso del canal en YouTube del Presidente, se precisa que del 3 de diciembre de 2018 al 29 de noviembre de 2019 se han desarrollado, dentro y fuera de Palacio Nacional 255 conferencias de prensa.

Los análisis también revelaron que la duración en promedio de cada encuentro del Presidente con los medios de comunicación es de 94 minutos, aunque al inicio solo duraba una hora, siendo la conferencia más larga fue de 2 horas con 30 minutos el pasado 31 de octubre cuando el Presidente y la prensa nacional hablaron sobre el caso LeBarón.

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